Unos perros callejeros cruzaron nadando a una isla de la reserva de Puerto Deseado, donde se encontraban los pingüinos, y diezmaron la población adulta de una colonia.
Biólogos del Centro de Investigaciones de la Universidad Nacional de la Patagonia Austral (UNPA) hallaron 370 pingüinos de Magallanes muertos en una isla de la reserva natural de Puerto Deseado, en el norte de Santa Cruz, tras el ataque de unos perros que llegaron a nado desde la costa, de acuerdo a información del Consejo Agrario Provincial (CAP).
Los ejemplares, todos adultos, se encontraban en la isla Quiroga, y fueron encontrados muertos con marcas de mordidas, según la bióloga Ana Milones, quien detalló que las aves fueron llevadas a un veterinario para que hiciera los estudios que confirmaron que realmente fueron mordidas de perros y no los predadores naturales de la especie.
La investigadora dijo que el CAP está realizando «un monitoreo más exhaustivo frente a la isla, que está muy cerca de la costa, para detectar si los perros vuelven a cruzar hacia la Reserva y controlar el área por donde podrían hacerlo a nad”. Sin embargo, agregó: “La reserva es grande y faltan personal, insumos y medios de movilidad… la verdad es que se les está complicando bastante».
En cuanto a la magnitud del daño que ocasionó el ataque de los perros, dijo que «si fue un evento único, para la población de pingüinos de la ría no debería implicarle demasiado, porque fue una sola de las colonias y no es de las más grandes». «Pero a la colonia en sí, que justo es la que más cerca está del continente, se le redujo un 12 por ciento la población reproductiva».
El ataque de los canes diezmó la población adulta que llega a la isla en esta época del año para reproducirse, «y seguramente va a impactar en el éxito» en la cantidad de descendencia «este año y sucesivos de esa colonia en particular, aunque no de la reserva total», apuntó.
H/T – Los Andes