Por más increíble que parezca es así, si una mujer en Hong Kong descubre a su esposo siendo infiel, la ley le permite matarlo sólo usando sus manos. Además, la esposa legítima puede adueñarse de la mitad de las propiedades que el esposo le ha dado a su amante.
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La verdad es que la infidelidad es una práctica que es entendida y vista de diversas formas en todo el mundo y en Hong Kong, China, el adulterio es uno de los delitos más graves que existen. Si un hombre es infiel y es descubierto puede correr el peligro de ser condenado a muerte, aparte con la particularidad que será su propia esposa la que decidirá si se lleva a cabo la ejecución o se le perdona.
Pero lo más increíble es que en este caso mujeres y hombres no son tratados por igual, pues si la mujer es la engañada solo puede acabar con su esposo si lo mata con sus propias manos; mientras que si sucede a la inversa el hombre puede dejar que sean otros los que maten a su pareja. Que conveniente no?
H/T – Matixpe
