Una investigación advierte que comer tierra es bueno para adelgazar, tras descubrir, por casualidad, que los compuestos de la arcilla tienen la propiedad de absorber gotas de grasa en el intestino.
Te puede interesar: Té de canela para adelgazar ¿cómo debo tomarlo?
Después de los excesos que traen las vacaciones, uno de los propósitos de cientos de personas es adelgazar y tener hábitos saludables.
Para ello, la mayoría de veces se incurre en probar una y otra dieta para lograr dicho objetivo esperando tener resultados positivos. Y a pesar de que estas dietas están basadas en porciones de proteínas, vegetales y baja cantidad de carbohidratos, ahora una investigación advirtió que comer tierra es la solución para los problemas de sobrepeso.
Se trata de un estudio de la Universidad del Sur de Australia en el que se descubrió por casualidad que los compuestos de la arcilla tienen la propiedad de absorber gotas de grasa en el intestino.
Aunque suene increíble, los investigadores determinaron que este material rustico sería la salvación para millones de personas que sufren de obesidad a nivel mundial.
«Estaba investigando la capacidad de los materiales de arcilla para mejorar la administración oral y la absorción de fármacos antipsicóticos, cuando noté que las partículas de arcilla no se comportaban como esperaba. En vez de descomponerse para liberar medicamentos, los materiales arcillosos atacaban las gotas de grasa y, literalmente, las absorbían», explicó el investigador Tahnee Dening para el portal Startsat60.com.
El científico explicó que las partículas que componen la arcilla, además de atrapar la grasa, logran evitar que el organismo las absorba siempre y cuando la grasa pase por medio del sistema digestivo.
Para llegar a estos resultados, los investigadores usaron durante dos semanas ratas para comprobar su teoría. Los animales fueron separados en dos grupos; a uno le suministraron montmorillonita, una arcilla natural que era purificada y acompañada de una dieta alta en grasas.
Al segundo grupo lo alimentaron con una arcilla sintética llamada laponita, y les dieron además un producto para la pérdida de peso llamado Orlistat.
Tras las observaciones y pruebas, lograron concluir que los dos grupos de animales habían perdido peso pero las que se alimentaron con arcilla “natural” tuvieron un resultado más beneficioso.
Sin embargo, frente al cuestionamiento sobre si era viable que el experimento funcionara en los humanos, el científico Dening aseguró que “estamos atacando la digestión y absorción de grasas de dos maneras diferentes y esperamos que esto conduzca a una mayor pérdida de peso con menos efectos secundarios”.
No obstante, el uso de la arcilla en una dieta común no es algo tan raro. En la antigüedad, este material era usado para fines medicinales como curar heridas y problemas inflamatorios.
“Comer arcilla es una situación común en África para evitar las deficiencias de zinc en el organismo, lo cual no es propio en los países desarrollados», indicó Rick Wilson, director del Departamento de Nutrición y Dietética del King´s Collage de Londres para el diario El Clarín.
H/T – Lafm