Una estrella gigante roja envolvió a otra más pequeña, que giró en espiral provocando que la primera estallara.
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El Observatorio Europeo Austral (ESO, por sus siglas en inglés) ha difundido una imagen del espectacular rastro dejado por una ‘lucha a muerte’ entre dos estrellas. Se trata de una peculiar nube de gas que se originó en el sistema binario estelar HD101584, y que ha sido detectada por un equipo internacional de astrónomos utilizando el Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA), ubicado en Chile.
La nube de gas surgió cuando la estrella principal del sistema, moribunda, se expandió hasta convertirse en un gigante rojo, envolviendo a la otra, de menor masa. Los astrónomos determinaron que lo sucedido en el HD101584 fue algo similar a una lucha estelar.
A medida que la estrella principal se convertía en una gigante roja, creció lo suficiente como para envolver a su compañera. Por su parte, la estrella más pequeña se desplazó girando en espiral hacia el núcleo del gigante, pero no chocó contra él. Antes al contrario, esa maniobra hizo que la estrella más grande estallara, dispersando sus capas de gas y dejando expuesto su núcleo, aclara el ESO.
El ‘proceso de muerte’
Al igual que las personas, las estrellas cambian con la edad y, en última instancia, mueren. Para el Sol y estrellas similares, este cambio lo conducirá a una fase en la que, después de haber quemado todo el hidrógeno de su núcleo, se expandirá hasta convertirse en una grande y brillante estrella gigante roja. Finalmente, el Sol moribundo perderá sus capas externas, dejando atrás su núcleo: una estrella caliente y densa llamada enana blanca.
«El sistema estelar HD101584 es especial, en el sentido de que este ‘proceso de muerte’ terminó de manera prematura y dramática cuando una estrella compañera cercana de baja masa fue engullida por la gigante», explicó Hans Olofsson, de la Universidad Tecnológica de Chalmers (Suecia), quien dirigió el trabajo.
Según los astrónomos, la compleja estructura del gas en la nebulosa HD101584 se debe a la trayectoria en espiral de la estrella más pequeña hacia la gigante roja, así como a los chorros de gas que se formaron en ese proceso. Como un golpe mortal a las capas de gas ya derrotadas, estos chorros se desplazaron a través del material previamente expulsado, formando los anillos de gas y las brillantes manchas azuladas y rojizas que se ven en la nebulosa.
Pistas que ayudan a resolver el rompecabezas
Los científicos esperan que esta ‘lucha estelar’ ayude a entender mejor la evolución final de estrellas como el Sol. Por ahora, «podemos describir los procesos de muerte de las estrellas, pero no podemos explicar por qué o cómo suceden exactamente. HD101584 nos da pistas importantes para resolver este rompecabezas ya que, actualmente, se encuentra en una corta fase de transición entre etapas evolutivas que han sido mejor estudiadas», declaro, por su parte, Sofia Ramstedt, de la Universidad de Uppsala (Suecia).
«Con imágenes detalladas del entorno de HD101584 podemos hacer la conexión entre la estrella gigante que era antes y el remanente estelar en el que pronto se convertirá», agregó.
H/T – Actualidad
