Una grieta de 16 centímetros en un tren bala nipón en marcha, pudo haber causado un grave accidente. Se trata del primer incidente grave desde que este transporte comenzara a operar hace más de 50 años.
La grieta fue encontrada en el chasis de un tren en movimiento, según confirmó un portavoz de la compañía ferroviaria que opera el servicio, West Japan Railway (JR West), quien añadió que ya se han revisado 80 vagones y que sólo en uno se detectaron problemas.
La grieta se produjo en el marco de acero que sostenía el conjunto de ruedas del modelo Nozomi 34 que cubría la ruta entre Hakata (sur) y Tokio, y estaba a punto de romperse, por lo que de haber continuado en marcha habría ocasionado un accidente serio.
Lo más preocupante es que el modelo Nozomi tiene capacidad para más de 1.300 pasajeros, que en esa oportunidad pudieron haber corrido grave peligro.
El tren bala que sufrió la avería tuvo que detenerse en la estación de Nagoya, a unos 350 kilómetros de su destino final, tras circular durante más de tres horas con un olor y ruido anormales.
«El incidente es inaceptable y somos conscientes de que se trata de un caso grave», dijo hoy el presidente de JR West, Tatsuo Kijima, en una rueda de prensa.
H/T – Informe21