Las cataratas del Iguazú (en portugués: cataratas do Iguaçu) se localizan sobre el río Iguazú, en el límite entre la provincia argentina de Misiones y el estado brasileño de Paraná. Están totalmente insertadas en áreas protegidas; el sector de la Argentina se encuentra dentro del parque nacional Iguazú, mientras que la porción del Brasil se encuentra en el parque nacional do Iguaçu. Fueron elegidas como una de las «Siete maravillas naturales del mundo».
El diario La Capital de Argentina, reporta una inusual crecida de los Ríos Paraná e Iguazú que puso en alerta todas las poblaciones en sus alrededores.
Una crecida nunca antes registrada del río Iguazú, que elevó su cauce habitual de 1.500 metros cúbicos por segundo (m3/s) a más de 45.000, obligó a cerrar la totalidad de los circuitos turísticos de las cataratas, informó ayer la Administración de Parques Nacionales (APN).
Las lluvias en toda la cuenca del Iguazú, mayormente del lado brasilero, hizo que los funcionarios del Parque Nacional activaran el protocolo de seguridad y cerraran el acceso a la Garganta del Diablo, el mayor de los saltos de las cataratas.
En el marco de ese protocolo, también comenzaron las tareas de rebatimiento de las pasarelas desmontables que se extienden por más de un kilómetro sobre el río Iguazú, para evitar su destrucción por resistencia a la fuerza del agua.
Las precipitaciones acaecidas en el sur de Brasil entre el jueves y domingo pasados, en la cuenca del Iguazú, principal afluente del Paraná, provocaron en consecuencia una rápida crecida de éste.
La corriente del Paraná hará que en los próximos días localidades de Misiones y Corrientes sufran graves inundaciones, advirtió la Entidad Binacional Yacyretá (EBY).
El Paraná ayer aceleró notablemente su ritmo de creciente hasta en un metro por hora en Brasil, según estableció la Entidad Binacional Itaipú. Las consecuencias llegarían a Posadas, capital de Misiones, en la madrugada de hoy.
En este video se muestra la crecida de los ríos.