El protocolo real les impide a los duques de Sussex, Meghan y Harry, recibir obsequios valorados en millones.
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Una simple regla del protocolo real hará que Meghan Markle y el príncipe Harry pasen por el mal rato de devolver cientos de regalos de boda. Así se dejó saber este jueves, cuando se informó que pilas de obsequios, valorados en casi 9 millones de dólares, tendrán que ser devueltos.
El Palacio de Kensington tiene sus normas y esta quedó establecida desde el año 2003. Los miembros de la familia real británica pueden usar los obsequios recibidos pero es preferible devolverlos o que sean entregados en donativos. De hecho, los duques de Sussex así lo pidieron, todo para evitar ser blanco de la publicidad.
«Los obsequios ofrecidos por personas privadas que residen en el Reino Unido y que no son conocidos personalmente por el miembro de la familia real deben rechazarse cuando haya dudas sobre la propiedad o los motivos del donante o del obsequio en sí», dicen las reglas del protocolo real.
En esta ocasión, cientos de empresas y personas enviaron presentes. Para evitar que algunas compañías hagan publicidad con la figura de Meghan y de Harry, muy populares en estos días. Todo indica que están preparando notas de agradecimiento para aquellos que reciban de vuelta sus regalos.
Los duques de Sussex eligieron algunas instituciones para que les entregaran los donativos. Scotty’s Little Soldiers, la cual apoya a niños huérfanos de las fuerzas armadas; Street Games, una fundación que usa el deporte para salvar vidas; una organización de Surfistas que limpian las playas, y The Wilderness Foundation UK, fundación que promueve la importancia de la naturaleza para salvar vidas se cuentan entre esas fundaciones.
H/T – Telemundo31
