Un estudio señala que un solo día de trabajo ya nos basta para cuidar nuestro bienestar mental. Analizaron la relación entre los cambios que se producían en el número de horas que los individuos trabajaban y su salud mental y bienestar.
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Un estudio reciente de las universidades de Cambridge y Salford señala que un solo día de trabajo ya nos basta para cuidar nuestro bienestar mental, para aumentar nuestra autoestima y el sentimiento de inclusión.
Analizaron la relación entre los cambios que se producían en el número de horas que los individuos trabajaban y su salud mental y bienestar.
Descubrieron que aquellas personas que pasaron de estar en el paro o de trabajar en casa por un empleo remunerado de ocho horas a la semana, redujeron el riesgo de sufrir problemas de salud mental un 30%.
La cifra se corresponde a los hombres; en el caso de las mujeres, para llegar a ese porcentaje, debían trabajar algo más, un total de veinte horas.
Por el contrario, los investigadores no hallaron ninguna prueba de que trabajar más de ocho horas le proporcionara más beneficios a la persona.
H/T – Elimparcial