Un hombre de 87 años, sin nietos, tenía un especial afecto por la hija de un matrimonio vecino, así que decidió dejarle regalos de Navidad seguros por los próximos 14 años.
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Apenas unas horas después de su muerte, los padres de Cadi, Owen y Caroline Williams, se pusieron a llorar cuando les tocaron la puerta para entregarles 14 regalos. La pequeña 14 tiene sólo dos años y había estados armando sus deseos de Navidad.
Un anciano de 87 años que vio crecer a la hija de su vecino había escondido en secreto los regalos para la pequeña, para ser entregados después de su muerte.
En un gesto conmovedor, Ken Watson envolvió 14 regalos para Cadi, en un acto final lleno de amor y de bondad antes de morir. La idea era que la pequeña tuviera un regalo por cada Navidad hasta cumplir los 16 años.
El anciano había quedado viudo cuando su esposa Beryl murió en febrero de 2012 y no tenía nietos. Así, buscó actividades para mantener la cabeza ocupado. Una de ellas fue ver a Cadi siempre que podía.
Apenas unas semanas después de su muerte, la hija de Ken, Jenny, descubrió la bolsa de regalos de Navidad cuando estaba limpiando la casa de su padre y descubrió que había dejado todo preparado para su pequeña vecina.
Cuando vio una bolsa negra, Jenny pensó que se trataba de basura o de cosas viejas. Pero ahí se dio cuenta de que en realidad eran regalos.
«Es difícil describirlo porque fue tan inesperado. No sé cuánto tiempo los guardó si fue durante los últimos dos años o si los compró hacia el final de su vida».
H/T – Clarín
