Una mujer de Fort Myers, en la costa suroeste de Florida (EE.UU.), se “casó” con un árbol centenario gigante que extiende su sombra benefactora en un parque público, para intentar evitar que las autoridades lo corten, informaron hoy medios locales.
Su nombre es Karen Cooper y organizó una ceremonia, con vestido blanco incluido, una torta y hasta invitados, en el parque Snell Family de Fort Myers. La mujer siguió los pasos de un grupo de activistas mexicanas contra la deforestación de los bosques, que decidió llamar la atención contrayendo matrimonio con árboles en ceremonias simbólicas.
“Lo vi y pensé que deberíamos casarnos con el ficus, como algún tipo de broma, pero la gente me dijo que era una buena idea. Así que dije, de acuerdo, vamos a hacerlo”, apuntó Cooper en declaraciones al diario The News-Press.
Aunque el laurel indio se encuentra en un terreno propiedad del ayuntamiento de Fort Myers, su raíces se extienden hasta un lote vecino que está a la venta por un millón de dólares. Por ese motivo, en diciembre pasado el departamento de obras públicas de la ciudad autorizó la tala del árbol, a lo que se oponen Cooper y un grupo de residentes en el vecindario de Valencia Terrace, que se ha movilizado para frenar cualquier intento de talar el ficus.
H/T – LP