Niños del sur de Florida (EE.UU.) enviaron cartas al senador Marco Rubio pidiéndole que interceda ante el Congreso para que aprueben antes de fin de año una ley «limpia» que proteja sin condiciones a los «dreamers».
Los hijos y hermanos de beneficiarios de los programas Acción Diferida (DACA) y Estatuto de Protección Temporal (TPS), fueron hasta la oficina del senador republicano en Doral (Miami-Dade) con dos cartulinas de gran tamaño en las que estaban escritas sus peticiones.
Se trata de un acto que forma parte de la iniciativa anual «Un sueño para las fiestas», dentro de la campaña «Nos mantenemos unidos» («We Belong Together»).
Entre lágrimas algunos de los niños expresaron su pesar por no poder compartir con sus padres en navidad porque fueron deportados y llevan años sin poder verlos.
Las estadísticas confirman la penosa situación que viven estos jóvenes. El objetivo de la campaña «Nos mantenemos unidos» es que la nueva ley para los «soñadores», que ampararía a miles de jóvenes que no conocen otro país, se apruebe junto al presupuesto antes de fin de año y que se haga sin condiciones.
La realidad es que uno de cada cuatro beneficiarios de DACA (Acción Diferida para los Llegados en la Infancia) tiene hijos nacidos en Estados Unidos, y 273.000 niños y niñas tienen padres o madres con TPS (Estatuto de Protección Temporal).
Sin embargo, la Administración Trump ha cancelado ya los TPS de haitianos, nicaragüenses y sudaneses y se teme que en 2018 tome la misma medida en el caso de los TPS de salvadoreños y hondureños.
Se espera que la campaña «Un sueño para las fiestas» culmine el próximo 7 de diciembre en Washington, cuando una delegación de unos 40 niños entregue todas estas cartas al presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, y al líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell.
H/T – Informe21