Luego de haberse cumplido 20 años de que la princesa Diana murió, un documental llamado “Diana, 7 Days”, lanzado por la BBC arroja unos datos sorprendentes, pues se enfoca en el dolor de su familia y seres cercanos a raíz de su partida.
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En dicho documental, sus hijos William y Harry recuerdan la última llamada que Diana les hizo, además de los difíciles momentos que pasaron después de enterarse del accidente de su madre, cuando ellos tenían 15 y 12 años respectivamente.
Tras la muerte de diana, los príncipes asistieron a un servicio en la Iglesia de Crathie para luego ir al castillo Balmoral para ver los regalos y tributos que dejó la gente a su madre. Como era de esperarse, todos ellos fueron fotografiados en todo momento.
La imagen de los príncipes con su padre viendo los tributos, ha pasado a la historia, sobretodo porque mostraban a unos pequeños completamente enteros, sin derramar una sola lágrima. Respecto a esto, William declaró en el documental:
“Cuando salimos y hacemos cosas como esa, para no quebrarte completamente, tienes que poner tu cara de póker. Tienes que ser bastante fuerte porque de lo contrario eres un desastre andante”.
Mientras que Harry, dijo lo siguiente:
“Mirando en retrospectiva, me alegro de no haber llorado en público. Había una línea muy fina entre estar de luto mientras trabajabas y estar de luto en privado. Incluso si algunos trataron de hacerme llorar en público, yo no pude, y probablemente aún no pueda.”.
La gente esperaba ver a los príncipes llorando, pero tenían tantos deberes reales que tuvieron que mantener la compostura y esperar para hacerlo en privado.
H/T – Perfecto.Gurú