Hay cosas que suceden en la vida que no tienen explicación lógica y pareciera que la intervención divina nos guiara a hacer cosas inusuales con un propósito que va más allá de nuestro entendimiento. Ese es el caso de la historia de Danny Wakefield, al que le cambió la vida luego de regalar una flor.
Danny salió de su casa, como cualquier día, y nunca se imaginó que lo que sucedería lo cambiaría para siempre. El joven, de Seattle, había comprado un girasol para regalárselo a una persona del que estaba enamorado pero terminó echándose atrás.
En vez de dejar que la flor se marchitara decidió dársela a una extraña de camino al trabajo. Fue con el girasol a la cafetería, a la que acostumbraba ir diariamente, y vio a una completa extraña. Pensó que ella podía ser la destinataria perfecta para el regalo, pues estaba sentada en una mesa llorando silenciosamente.
“Es como si el girasol actuase como un imán hacia ella, porque en el momento que la vi supe que era a quien iba a entregárselo”, escribió Danny en su página de Facebook junto a la foto del girasol.
Cuando Danny se acercó para darle el girasol, no estaba preparado para la reacción de la joven.
“Cuando me acerqué a la mesa le dije: ‘Perdóneme. Tengo este girasol que pensaba dárselo a alguien especial, pero al final no lo he hecho, pero he sentido que tú también eres especial, así que quiero dártelo a ti’. Antes de que pudiera ni siquiera dársela, esta completa extraña se abalanzó sobre mis brazos con lágrimas en los ojos, como si yo fuera alguien a quien había amado, y perdido. Lo que me dijo después es lo que aún estoy tratando de superar”.
Wakefield explicó que la chica le contó que estaba llorando porque su prometido había fallecido la semana anterior y que en su primera cita, él le obsequiado justamente un girasol, y desde entonces, siempre le regaló girasoles, nunca rosas, porque «ella era la luz de su vida».
«Hoy, a través de mi, él había podido mostrarle que siempre será la luz de su vida y como nosotros, los humanos, tenemos un mensaje que va más allá de las palabras”, agregó Danny.
La conmovedora historia se volvió viral en poco tiempo, generando un bello movimiento denominado “Sunflower Challenge” que reta a la gente a regalar un girasol a un desconocido para alegrarle el día.
H/T – Facebook