El coito interrumpido es muy utilizado como método anticonceptivo, aunque no lo sea, pero esta acción no es tan segura como todos creen.
De acuerdo a una información suministrada por una aplicación de fertilidad, llamada Glow, el 18% de las parejas usan el coito interrumpido como su método anticonceptivo principal, mientras que, de acuerdo a varias instituciones americanas, alrededor del 60% de las mujeres lo han usado en algún momento de sus vidas.
Utilizar esta técnica es entendible ya que la mayoría confía en el condón como único método confiable, pero también es el menos placentero, mientras que el coito interrumpido se siente bien, es conveniente y económico.
Sin embargo, no todo es tan bonito, pues para usar este supuesto método adecuadamente, el hombre debería de ser súper asertivo, es decir, tiene que saber exactamente cuándo va a eyacular y dejar de penetrar en el momento preciso.
Es así, según los estudios para que el coito interrumpido sea tan efectivo como el condón, el chico debe ser preciso al 100%, cuestión que es muy difícil de lograr. Además, que está en juego tu cuerpo al darle toda tu confianza a las habilidades poco precisas de tu pareja.
Así que el coito interrumpido pasa a ser de un supuesto método anticonceptivo (como lo llaman muchas personas), a una excusa para no practicar sexo seguro. Por lo que tú decides si vas por el condón o por cualquier otro método que sea eficaz y que esté comprobada su seguridad, para que evites malos ratos.
H/T – emedemujer