La navidad es una época para celebrar con la familia y los amigos. En cada reunión la comida es deliciosa y la mayoría de nosotros sube unos cuantos kilos en esta época.
La realidad es que los excesos de comida y bebida que son los compañeros perennes de estas fechas. Esto se traduce en unos kilos de más para enero, pero ¿qué podemos hacer para evitarlo? Aquí te decimos el secreto.
Muévete
Si ejercitarte en tu día a día es importante, lo es aun más en estas fechas. Recuerda que el compromiso es contigo mismo y con tu salud. Si sacas 30 minutos diarios para dedicarlos a una pequeña rutina de ejercicio en casa, pasarás este més sin variaciones graves en la balanza.
Reduce los excesos a los días festivos
La comida en esta fecha es un placer, pero no tienes por qué consumirla a diario. A pesar de las tentaciones, como por ejemplo los turrones que desde principios de octubre ya se ven en las estanterías de los supermercados, en realidad puedes consumir este tipo de alimentos solamente los días que celebres en familia o con amigos.
Reduce el consumo de alcohol
El alcohol puede duplicar fácilmente las calorías que ingerimos en una comida. Si los días de fiesta nos sentamos frente a una abundante mesa, regamos las copas con distintos vinos y después nos alegramos la noche con unas cuantas copas estaremos consumiendo calorías (y calorías vacías en el caso del alcohol, sin aporte de nutrientes) en cantidades desmesuradas.
Si no quieres eliminarlo, reduce su consumo en las comidas: una vez consumida tu copa de vino, rellénala con agua, no con más alcohol. Restarás calorías y sumarás en salud.
Cocina para las fiestas
Si crees que vas a llegar a la mesa un día de celebración y no vas a encontrar nada saludable que llevarte a la boca, ¡prepáralo tú mismo! Quedarás súper bien ante los anfitriones, puedes animar a los comensales a que prueben nuevos alimentos o sabores y tú seguro que tendrás algo de picar.
No te saltes comidas por miedo a engordar
Una de las peores cosas que puedes hacer cuando vas a cenar en navidad es saltarte la comida anterior por miedo a engordar. Con esto lo único que conseguimos es llegar a la cena con muchísima hambre y arrasar con todos los aperitivos que encontramos en la mesa (que, a excepción de los postres, suele ser lo más calórico que hay).
En lugar de eso, procura hacer una comida ligera que te mantenga saciada hasta la hora de cenar.
Aumenta el consumo de frutas y verduras
Cualquier época del año es buena para esto, pero la Navidad es el momento ideal para que frutas, verduras y legumbres llenen tus platos. Desde cremas y sopas hasta sabrosas lasagnas de berenjena o hamburguesas de lentejas. Las verduras no son solo para el verano.
Los cítricos como las naranjas o las mandarinas son un excelente postre para cualquier comida.
H/T – trendencias.com
