Eso es lo que dice esta pareja del Barking, un suburbio al este de la ciudad de Londres.
Mirjeta Binoke no tiene ningún tipo de problema en admitir que una forma luminosa, con un parecido innegable a un ángel, se posó sobre su casa.
Mirjeta, de 38 años de edad, estaba en su jardín trasero disfrutando la noche de verano con sus amigos cuando se percató de la aparición divina, entonces disimuladamente, caminó por los alrededores mientras tomaba esta foto.
Se dice que ya hay peregrinos que se dirigen al barrio de Barking en lo que se está convirtiendo en la ciudad-santa de Londres.
Con información de: Metro UK